Como comentaba la otra vez en Artepolítica, yo soy consumidor de pochoclos y traficante de tutuca. Como tal, me parece bastante estúpido -en todos los ámbitos- andar juzgando las decisiones personales de los demás.
Lo que sí tengo claro, por decisión personal, es que si algo jamás probaría es el alcohol y el tabaco. Y la sociedad argentina -digo, la sociedad conservadora, que adora a Francisco, a Bergoglio y al padre Grassi- parece pensar lo contrario. Yo les tengo miedo, porque sé que matan, cosa que aún no me queda clara en el caso de la marihuana por ejemplo. Es llamativo cómo tuve y tengo que explicar por que no tomo alcohol, como sí tiene que explicar por que sí fuma marucha el que lo hace. Los estándares de una sociedad pelotuda.
Lo que sí tengo claro, por decisión personal, es que si algo jamás probaría es el alcohol y el tabaco. Y la sociedad argentina -digo, la sociedad conservadora, que adora a Francisco, a Bergoglio y al padre Grassi- parece pensar lo contrario. Yo les tengo miedo, porque sé que matan, cosa que aún no me queda clara en el caso de la marihuana por ejemplo. Es llamativo cómo tuve y tengo que explicar por que no tomo alcohol, como sí tiene que explicar por que sí fuma marucha el que lo hace. Los estándares de una sociedad pelotuda.
¿Se atreverían Joaquín Morales Solá, Nelson Castro, Mariano Grondona o Eduardo Feinmann a decir que Quilmes o Marlboro venden droga, y que para colmo mata a miles de argentinos por día, incluso menores? ¿Por que no lo dicen? ¿Porque las empresas que venden esa droga son de las mas importantes del país? ¿Porque son las que ponen la tarasca? ¿Que tan bueno es el Roundup de Monsanto para la salud? ¿Por que se vende sin receta el clonazepam, o el alplax, o el valium? ¿Que onda con Roche o Merck? ¿Por que en una química puedo comprar libremente un kilo de cianuro de sodio? ¿quien garantiza que no quiero atentar contra la vida de cien o doscientas personas?
Que en Buenos Aires no se pueda plantar una planta de coca, o de marihuana, no habla del combate contra el narcotráfico, habla de una sociedad adolescente que sigue metiéndose en la vida de los demás, y que por ese apetito insaciable de masturbarse con el organo sexual del otro, siguen existiendo Tinelli, Rial y Zulma Lobato. Y también el narcotráfico, porque no hay porro que venderle al que tiene la planta en su casa, dejémonos de joder.
Fuentes:
Imágen:
http://casiazul.blogia.com/upload/20071120114929-20051021144751-nubes-humo-2.jpg
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